Aunque siguen existiendo proyectos 2D para televisión, Disney ya no produce largometrajes en ese formato, ni está utilizando animación tradicional. En estos momentos, la factoría solamente produce en 3D. Los últimos proyectos en dos dimensiones fueron Winnie the Pooh y Tiana y el sapo.
Eso es por lo menos lo que ha dicho Bob Iger, director ejecutivo de Disney durante la reunión anual mantenida este miércoles con los accionistas en la ciudad Phoenix, en Arizona. Aunque según las declaraciones que ha dado para el diario británico The Guardian, no se descartan este tipo de proyectos en el futuro, pero que en estos momentos no se están haciendo ni se está planeado que se hagan.
Aunque su primer éxito en el antiguo formato llegó de la mano de Blancanieves y los siete enanitos en 1937, y aunque en estos tiempos aún siga siendo una de las películas más taquilleras de la historia, parece que se ha quedado obsoleta. Parece que la opinión de los expertos sobre que el 3D sería el futuro, se ha cumplido.
El primer largometraje en 3D
La innovación llegó a Disney en el año 2000 cuando presentó su primer largometraje en este nuevo formato. Bajo el título Dinosaurio, se convirtió para la compañía en un producto creado para volver a ganar su sitio en el mercado y arrebatar a Pixar y Dreamworks el terreno que ya habían conquistado.
A pesar de que se anunció el cese de la producción con métodos más tradicionales, con la llegada de John Lasseter como jefe de animación volvió a confiar en las posibilidades que esos métodos le ofrecían. Es en ese momento cuando apostando fuerte y con decisión se producen las últimas piezas en dos dimensiones: Winnie the Pooh y Tiana y el sapo.
Producción en dos dimensiones para la televisión
A pesar de que Disney haya anunciado que su producción en dos dimensiones para largometrajes se va a dejar de lado de momento, eso no quiere decir que este formato se haya descartado en todas sus producciones. En televisión todavía tienen proyectos en marcha y en esta área se siguen planeando futuras producciones.
Según Iger: “Hay mucha actividad en Disney dentro de la animación 2d, pero se centra en la televisión en este momento”. Por tanto, no se puede decir que la forma más tradicional esté totalmente descartada en el mundo audiovisual y que todavía algunos creen que puede llegar a funcionar en algunos formatos y soportes.